Barcelona acogerá en 2024 la prestigiosa Copa América de vela, reconocida como la regata más antigua y una de las competiciones más destacadas del mundo de la navegación a vela. La competición se caracteriza por su enfoque en la innovación tecnológica y el uso de embarcaciones avanzadas y de alto rendimiento. A lo largo de los años, se han realizado significativos avances en el diseño y construcción de los veleros empleados, con el propósito de alcanzar la máxima velocidad y eficiencia en el agua.
El proyecto, que cuenta con el respaldo del empresariado catalán y una inversión de más de 70 millones de euros, tiene como objetivo generar un impacto económico de más de 1.000 millones de euros y crear aproximadamente 18.000 puestos de trabajo. La competición náutica es reconocida como el tercer evento deportivo de mayor relevancia a nivel mundial y se equipara en importancia a las ediciones del Mobile World Congress que se celebran en la capital catalana. Aunque la fecha exacta del evento de la regata aún no ha sido confirmada, se contempla que tenga lugar en el último cuatrimestre del año y se espera que genere un impacto económico significativo, promoviendo la imagen de Barcelona y Catalunya a nivel internacional.
Durante el evento, celebrado el pasado 10 de mayo, en el Colegio de Economistas con los organizadores de la Copa América de Vela, el CEO de Crowe Spain, Carlos Puig de Travy, destacó diversos aspectos clave de la competición. En primer lugar, hizo hincapié en el enfoque tecnológico y sostenible de la Copa América, reconociendo la importancia de la innovación y la aplicación de tecnología avanzada en el ámbito de la vela. Además, Puig resaltó el compromiso de la Copa América con el territorio, enfatizando la relevancia de impulsar el desarrollo económico y social, con la participación de diversos países, equipos y personas en la competición. Estos valores de tecnología, sostenibilidad, compromiso con el territorio, diversidad e inclusión son elementos sumamente apreciados en el marco de la Copa América de Vela y reflejan la actual orientación de la competición hacia la promoción de un deporte más sostenible e inclusivo, en sintonía con los desafíos y demandas del mundo actual.
En resumen, la Copa América de Vela se presenta como una oportunidad única para potenciar el desarrollo económico y generar empleo en Barcelona, consolidando su posición como un destino atractivo para eventos deportivos de gran envergadura.