El mercado mundial de granos
En riesgo por conflicto entre Rusia y Ucrania
Durante el conflicto entre Rusia y Ucrania la exportación y la economía han dado un giro importante alrededor del mundo, trayendo consigo un alza de precios en algunas industrias como la del combustible, energía, alimentos de la canasta básica y en muchas otras ocasiones, la escasez de productos como metales, trigo, maíz y cebada, entre otros han generado un golpe directo a los hogares comunes y a la agricultura en algunos países del mundo.
Las consecuencias económicas de una invasión o una posible interrupción de la producción agrícola de Ucrania podrían tener un impacto directo en el suministro de alimentos y generar efectos colaterales, pues este país se caracteriza por ser uno de los cuatro principales exportadores de cereales del mundo y se calcula que representa una sexta parte de las importaciones mundiales de maíz.
Así mismo, Ucrania y Rusia llegan a producir casi el 30% del trigo que se comercializa en el mundo, lo que aporta el 12% de las calorías que genera la industria en el mundo anualmente, dejando claro que cualquier cambio inesperado en su exportación lograría una inestabilidad comercial en el mundo, pues su importancia en el mercado de exportación es vital en países como Asia.
Después de que los precios de los alimentos ya estaban subiendo de precio mientras disminuían las restricciones de la pandemia, los países estaban tomando decisiones económicas para buscar soluciones a una posible crisis, sin embargo, el inicio del conflicto bélico llegó en el peor momento, dejando ir por un mal camino las cosas y evitando que al menos unos 20 millones de toneladas de trigo ucraniano llegaran a Medio Oriente, el norte de África y partes de Asia.
Por eso, una de las primeras negociaciones fueron los acuerdos que hubo después de ver un conflicto en la exportación, con el fin de crear corredores seguros que permitieran sacar granos de los puertos de Ucrania por el Mar Negro, lo que se llevó a cabo gracias a las mediaciones de Turquía y la Organización de las Naciones Unidas (ONU), y que trajo consigo un marco de reglas donde las partes se comprometieron a cumplir durante 120 días, con posibilidad de extensión.
Según datos de la ONU, después del acuerdo mencionado anteriormente en el mes de julio, se venía exportando alrededor de 0,98 millones de toneladas entre granos y oleaginosas, siendo como principal producto el maíz y según cifras del Ministerio de Política Agraria y Alimentación de Ucrania, el mes de agosto se exportó 4,27 millones de toneladas, logrando un récord positivo a cifras del mes de julio desde el comienzo de la invasión, entre un 60 y 70% de lo que se exportaba antes del conflicto bélico según el Consejo Agrario de Ucrania.
Sin embargo, a pesar de que el acuerdo se había propuesto hasta el 19 de noviembre del 2022, a finales del mes de octubre estas negociaciones cambiaron de rumbo tras una acusación de Rusia, donde el gobierno de defensa afirmó ser atacado con drones en la bahía de Sebastopol, en la península ucraniana de Crimea, lo que dejó más de 10 buques tanto salientes como entrantes esperando para transitar el corredor.
“Es probable que el retroceso de Rusia el fin de semana en un acuerdo negociado por la ONU para exportar granos del Mar Negro afecte los envíos a países dependientes de las importaciones, profundizando una crisis alimentaria mundial y provocando ganancias en los precios.” Mencionan medios locales, quienes se esperan a la respuesta de confirmación por parte de este país para seguir las exportaciones.
¿Qué consecuencias trae esta suspensión?
Tras la decisión de Rusia en la suspensión de la exportación de granos ucranianos el pasado 29 de octubre los futuros de trigo se dispararon un 7,7% y los del maíz un 2,8%, así mismo, el trigo en la Bolsa de Comercio de Chicago subió un 6% y cotizó por encima de los USD 310 la tonelada, lo que según expertos esta, podría ser una de las jornadas de pérdidas más importante del año, perdiendo todas las ganancias que se habían generado durante la semana.
En Singapur, el maíz subió un 2,8% y el aceite de soja un 3%, y según algunos medios se afirma que este impacto por la suspensión podría aumentar la inflación mundial de los alimentos en los países donde su economía depende de una gran parte por este tipo de exportaciones.
Por otro lado, en América Latina se estima que esta situación no agrave la situación económica, pues en algunos países como Argentina, quien es uno de los mayores exportadores de trigo, continúan con el alza de productos por los precios elevados de las materias primas que usan en el proceso de cosechas, por lo que las opciones de que este y otros países exportadores de países pudieran salvar esta economía no llegó a ser viable.
El ministerio de Defensa del Rusia expresó lo siguiente en un comunicado: “La Federación Rusa considera que las garantías recibidas en este momento parecen suficientes y reanuda la implementación del acuerdo”. Adicional se agregó que hay garantías de que Ucrania no utilizará el corredor humanitario para realizar ataques sobre el ejército ruso, confirmando que las operaciones se podrían reanudar dentro de estos primeros días de noviembre.
El mundo está a la espera de las respuestas por parte de Rusia para volver a retomar las exportaciones, pues aún no se estima qué consecuencias más graves podría traer para algunos países si esta suspensión indefinida continúa vigente o si dicho país decide continuar con los acuerdos que se habían firmado en el mes de julio.
Fuentes: BBC News